en la selva

Sobre San Pedro. Sobre el viaje. Estamos todavia rondando el material, oliendolo (a qué huele San Pedro?). Otra vez el crudo me dió una sorpresa; realmente pensaba que lo habiamos filmado no era del todo bueno, pero no, ni ahi, el material está buenisimo. Al grabar con una variedad de formatos, desde la super8 hasta la mini-dv, pasando por la HI-8, que, sin duda, tiene todo el jugo, siento como si eso nos dio un par de punto a favor. San Pedro, o, al menos la forma en la que nosotros lo vemos, no me gusta a traves de sosportes digitales. Para nosotros es rugoso, es àspero, es gastado, es sepia, es blanco y negro, es fuera de foco, es 36 fotos con cámara analógica. Es el ruidito de la super8.

Y ahora, estamos en eso. En ver qué generamos con el material, en ver como unimos todos esos formatos, en ver qué sale. Hablamos algunas idas. La de carta audiovisual, una carta escrita de una forma particular, escrita con árboles, con caballos lastimados, con el sonido del viento, con arena, con una multitud frente a la iglesia. Y pensar en la forma de esa carta. Seguramente va a ser una carta violenta, que hable de alguna ruptura, de algún viaje extraño, de algo enrarecido. Escrita con una letra grande, desprolija, que no se entiende mucho.
La mayoria de las tomas van por ese lado: la velocidad o la lentitud absoluta, el movimiento, el ir y venir, la busqueda. Sabemos que justamente esas deben ser las caracteristicas del trabajo final, al cual le podriamos agregar algunos elementos que venimos habalndo con Marlene y Tamara, elementos como la molestia, la descontextualización de San Pedro, el montaje entrecortado, el sonido ensordeceror, molesto, la contemplación o no de la naturaleza, las ganas de enrarecer todo, de darlo vuelta. La idea de quedarnos a vivir en la selva que nos construimos.

Ahi estamos.